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Paz luz y amor en 2013


 El 2013, es un año de cristalizar cuestiones que han sido proyectadas desde nuestro interior, con la energía de la nueva conciencia. Todas estas cuestiones, proyectos, objetivos, planes, irán tomando forma conforme vayamos canalizando la energía en la ascensión.



Por otro lado, todo aquello que aún nos vincula y nos limita, debe ser erradicado de nosotros para poder hacer los cambios. Hoy esto está ya en puertas, para que la entrada sea la correcta. Si queremos seguir vinculados al pasado, con apegos y ataduras que ya no tienen sentido, entonces sigamos el camino, tal cual lo hayamos trazado. Pero si ese no es nuestro fin, si el cambio en nuestro interior quiere ser dado, entonces guiémonos por él, trabajemoslo y llegaremos al fin como almas bendecidas en la nueva vibración, en la nueva frecuencia.



Ahora, es el momento de proyectar todo lo aprendido e integrado durante el año 2012, en nuestro día a día, en lo que vivimos  en lo que hacemos, con quien estamos. Quien se acerque a nosotros en todos los ámbitos, la energía deberá ser proyectada.

alentemonos a que poder canalizarla en la dirección correcta, nunca desde el ego, siempre desde el corazón; nunca desde el intelecto, siempre desde la mente. Sólo así unificaremos ambos niveles y de esta forma podremos llegar a consentir y a entender lo que implica este cambio.

Ahora, en este momento, es tiempo de introspección, de terminar de centrar y reflexionar sobre lo vivido, de terminar de cerrar las puertas que aún nos queden abiertas, de terminar de centrarnos desde nuestro propio centro, para así y solo así, empezar la nueva andadura.

Interpretemos las señales, interpretemos lo sentido, lo vivido, solo así podremos terminar el cuadro que empezamos a pintar cuando nuestra alma llegó a ese plano por primera vez. Se termina el lienzo, ya no hay espacio, solamente aquello que resta, deberá ser escrito, dibujado, pintado. Ese cuadro llegó a su fin, para que empecemos a pintar uno nuevo, desde la nueva conciencia de la luz, desde el nuevo ser interior, desde nuestro cristo divino, que está ahí y sigue las pautas establecidas por la conciencia divina que aún no ha sido integrada y colocada en su sitio.



alentemonos a seguir caminando, a seguir aprendiendo, a seguir enseñando, todo antes de que podamos volver a lo vivido, por no poder liberarnos.



En estos cambios todos jugamos un papel importante, todos aunando fuerzas hacia la nueva luz de este nuevo sol que se  nos abrió paso a través del portal del día 12 y que se asentó a partir del solsticio del 21. Este nuevo sol que irradia una luz nueva para todas las almas que sintonicen con él, irá dando nuevas pautas de encuentros y experiencias.



Encontremos nuestro espacio-tiempo, encontremos nuestro lugar, para caminar libres de aquello que no nos permite seguir lo que nuestra alma pidió antes de encarnar. Para todos aquellos que aun hoy siguen el camino contrario a lo que su alma se comprometió, esta vibración puede que no sientan que les esté ayudando pues les es dura y densa, a pesar de que la vibración alta no posee densidad, para ellos sí lo es, precisamente porque su vibración no encaja.

Si no nos dejamos fluir ante la frecuencia de nuestro ser interno, ante la vibración de nuestro ser de luz, entonces como nos va a ser fácil seguir fluyendo si nos cuesta en nuestro día a día aplicar las leyes que proceden de nuestra alma, de nuestro ser de luz, de la voluntad divina del creador.

Así pues, esta voluntad divina que no es más que la voluntad de nuestro ser crístico, de nuestro cuerpo de luz, será la que de ahora en adelante guíe nuestros pasos, ya que es la que ha sintonizado con nuestra alma en estado de conciencia de apertura y despertar. Así pues, demosle confianza a esa parte de nosotros y sigamos lo que vuestro corazón en sintonía con él nos indique.

empujemonos y alentemonos a seguir nuestro proceso de cambio y, asimismo, demonos  la bienvenida ante la sintonización de esta nueva energía que ya está en nosotros, vivamosla y movilicemosla en la dirección que nuestro ser interno nos guíe, sólo así conseguiremos el propósito de ascensión que será el fin de nuestro cambio.

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