Muchas personas deciden por sí mismas ser infelices y solo ven el lado malo del mundo, no se satisfacen con nada, y por el contrario dedican su vida a quejarse de su pasado. Su pensamiento es, "algo ocurrió en el pasado y no debió pasar, eso no me permite ser feliz ahora" ; si para ser felices necesitáramos que nuestro pasado hubiese sido maravilloso, yo creo que nadie sería realmente feliz. Lo paradójico de esto es que a la misma vez que se están quejando, sufriendo y odiando, estas personas dicen que anhelan ser felices y se preguntan (y nos preguntan), ¿por qué yo no puedo serlo?. No se dan cuenta de que con su manera de actuar jamás lograrán ser felices, ni por asomo. Porque llevan años cultivando pensamientos de miseria.